El mantenimiento del piano depende de muchos factores: su frecuencia de uso, la climatología, el estado del instrumento, las exigencias del pianista, los cambios de lugar...
Por ejemplo, los pianos de concierto se regulan, afinan y entonan siempre antes de un concierto, e incluso durante el descanso de éste se hacen retoques en la afinación si fuese necesario.
Si el piano se usa unas 5 horas a la semana con una afinación anual es suficiente para conservar el buen estado del instrumento, aunque lo ideal es realizarla semestralmente. Si el uso es menor o nulo, el piano debe afinarse igualmente, puesto que no hacerlo podría suponer daños en la tabla armónica, puentes...reparaciones costosas que se evitarían con una afinación de mantenimiento cada 18 meses.
Con un uso normal, la regulación y entonación se deben realizar cada 3 ó 4 años.
Con un uso intensivo de más de 4 horas diarias (escuelas, conservatorios...) los pianos deben ser afinados cada 3 ó 4 meses y regulados anualmente.
Si usted quiere disfrutar siempre al máximo de las prestaciones de su instrumento y que en todo momento conserve sus cualidades sonoras y mecánicas, consulte mi de Contrato de mantenimiento.